Reeducación de la marcha con prótesis

 

Nuestro principal objetivo será conseguir una buena adaptación del paciente a su prótesis y lograr un buen patrón de marcha suave y estable. Dividiremos este periodo en tres fases:

Primera fase:

• Lo que prima es conseguir que el paciente se ponga y quite su prótesis correctamente, mejor él solo, y si no, con ayuda de su principal cuidador. Es fundamental la pronta familiarización con la prótesis.

• Insistiremos en la realización del masaje tal como se enseñó en el periodo anterior, tratando de mantener un trofismo y una hidratación adecuada en la piel del muñón para evitar en la medida de lo posible heridas y rozaduras

• Comenzaremos a realizar ejercicios con la prótesis puesta:

• Paso de sedestación a bipedestación y viceversa

• Bipedestación en paralelas: asegurándonos una postura equilibrada y una buena carga del peso del cuerpo sobre la prótesis

• Transferencias de peso en bipedestación, balanceos y correcciones frente al espejo

• Marcha en el sitio

Segunda fase:

• Entrenaremos la marcha en paralelas, hacia delante, hacia atrás, de lado y los giros

• Corregiremos patrones anormales en la marcha (pasos cortos, balanceos indebidos, mal apoyo protésico,…)

• Comenzaremos el entrenamiento y la familiarización de la marcha con bastones (en cuatro, tres y dos puntos)

Tercera fase:

• Trabajaremos la marcha con obstáculos, rampas, escaleras, planos irregulares, tanto en paralelas como fuera de ellas

• Buscaremos ir quitando ayudas a la marcha si fuera posible (primero un bastón y luego ambos)

Al final de estos periodos ya habremos conseguido cierta autonomía y destrezas, objetivos finales de esta rehabilitación.

FASE POST-PROTETIZACIÓN

Será en la que iniciemos al paciente en la práctica deportiva así como en actividades recreativas y/o de ocio, siempre y cuando las características y estado del paciente lo permitan.

CONCLUSIONES

En una sociedad como la actual, con una población cada vez mayor, nos enfrentamos a diario más que antes a ciertas patologías que no estaban tan presentes, y que se acompañan a su vez de otros problemas que merman la calidad de vida de la población. Uno de esos problemas, es el aumento de las amputaciones, fundamentalmente de miembros inferiores, debidas a vasculopatía periférica y diabetes.

Con la Fisioterapia, conseguimos que los pacientes se adapten mejor y más rápidamente al uso de prótesis, con lo cual pueden volver a llevar una vida más activa y plena, algo tan importante en todas las edades, pero más en la tercera edad, que en este caso es la más afectada.